Me va mejor de payasito que en un trabajo estable

Víctor Espinoza expresó que tiene miedo enrolarse en un trabajo estable y que lo le alcance para mantener a su familia, por eso es payaso de crucero.

A cuatro meses de haber tomado la decisión de ganarse la vida como payasito de crucero, Víctor Espinoza Ramos tiene la esperanza de crecer en esta actividad para mantener a su esposa, dos hijos y un tercero que viene en camino.

El joven payaso en su diálogo mencionó que tenía tres años dedicándose a limpiar vidrios en las esquinas de los semáforos, pero tomó la decisión de cambiar de oficio al ver que sacaba menos que un payaso que estaba en ese sector, fue entonces que comenzó a observarlo y a aprender a hacer malabares con pelotas para dedicarse a esto.

Víctor afirmó que lo único que pretende con este oficio es ganar dinero para darle a los suyos lo que necesitan y más ahora que su esposa tiene tres meses y medio de embarazo.

Apuntó que se la pasa cuatro horas en el crucero y con eso saca el día, además destacó que busca trabajar en varios lugares para no fastidiar a la gente, además reconoció que las personas que pasan siempre lo apoyan con una moneda y le dice que le eche ganas.

“Yo me pongo a pesar y me preocupa no hacerla con lo que paguen en un trabajo estable, tengo dos hijos, esposa y el que viene, pago renta, agua, luz, comida… Son muchos gastos”, expresó.

Agregó que le va mejor como payasito y comentó que él busca ganarse el dinero honradamente; asimismo dijo que es difícil estar muchas horas en un crucero, incluso confesó que a veces se deshidrata, pero recalcó que es mejor ganar el dinero honestamente que andar haciendo cosas malas.

Por último expuso que piensa más adelante subirse a los micros y contar chistes para hacer reír a la gente como lo hacen los payasos y así ganar más dinero.