Violencia en el fútbol mexicano: La Liga tiene que actuar
La Liga tiene que actuar.
El 11 de Febrero del 2017.
Durante los últimos minutos del clásico tapatío, aficionados de Chivas y Atlas se tunden a golpes en las tribunas del Estadio Jalisco.
Tras el triunfo para Chivas, la gresca continua en las zonas aledañas. Los comerciantes ubicados afuera del estadio, fueron agredidos, y tras un operativo que involucró a más de 900 policías, se detuvieron a más de 70 personas.
La Liga tiene que actuar.
Seis días después, la escena se repite en el Luis Pirata Fuente.
El partido es Veracruz vs Tigres. En un video publicado en Facebook, se ve la forma en la que la aficionados veracruzanos corren de un lado a otro del estadio, para agredir a los seguidores de Tigres, dando inicio a una batalla campal que dejó varios heridos. Ni los intentos de jugadores de Tigres por calmar los ánimos de las Tribunas, ni mucho menos la reacción histérica del Tuca Ferretti reclamando a los policías su nula reacción para prevenir la violencia, fueron suficientes. De hecho, los proyectiles lanzados de un lado a otro, alcanzaron al jugador Jesus Dueñas, quien sufrió una aparatosa herida en su brazo izquierdo.
La Liga tiene que actuar.
La violencia, ha sido una materia pendiente para el fútbol mexicano desde hace varios años.
Sin embargo, las promesas de la Liga MX, para crear estadios seguros, han sido inútiles.
La Liga tiene que actuar.
Al menos desde el 2012, los enfrentamientos entre aficionados se han convertido en una constante, pero no sólo ello, sino que en cada ocasión, se refleja un mayor nivel de violencia y agresión.
La liga tiene que actuar.
Fanáticos, policias y jugadores han salido heridos.
Crear un hashtag, o hacer que los equipos salgan con mantas pacíficas y que jugadores den discursos vacíos antes de cada partido no resuelve el problema.
La liga tiene que actuar.
¿Quién dejó abiertas las compuertas que dividen las secciones del Pirata Fuente, para permitir el libre desplazamiento por todo el estadio de los barristas del Veracruz hasta llegar sin ningún problema a enfrentar a los del Monterrey?
En Argentina, se decidió prohibir la entrada a los aficionados de los equipos visitantes. En Inglaterra, cada equipo visitante cuenta con una sección perfectamente aislada, dividida y vigilada.
En México ¿existen protocolos de seguridad que vayan más allá, de un discurso que se queda en un hashtag de redes sociales o en niños liberando palomas blancas?
La liga tiene que actuar, pero los aficionados también.
