Marca 2022 récord de días con aire contaminado en urbe regia

De acuerdo con datos de la Secretaría de Medio Ambiente del estado de Nuevo León, siete de cada 10 días que transcurrieron de enero a julio estuvieron “muy sucios” porque rebasaron los niveles permitidos de contaminación.

Esta situación evidencia que, lejos de mejorar, el problema ha empeorado, por lo cual la dependencia ya cocina un nuevo “Programa Integral de la Calidad del Aire”, en el que establecerá las acciones que se deben tomar dentro de los próximos 10 años para combatir la contaminación.

El programa fijará la cantidad o cuota de emisiones que deberán reducir los sectores industriales, transporte, construcción, agrícola, y otros, hacia el año 2032.

Y es que de los 212 días que comprendió el periodo de 1 de enero al 31 de julio, 158, es decir, el 75%, estuvieron “fuera de la norma”, lo cual significa que rebasaron los niveles “aceptables” de contaminación, afectando la salud de la población.

De esos 158 días, en 142 se rebasó el límite de PM10; en 65 el ozono (O2); en 52 las partículas PM2.5 y en uno el dióxido de nitrógeno (NO2).

Estos son los contaminantes más frecuentes en el cielo del área metropolitana de Monterrey. Según el reporte de la dependencia, el motivo que originó que en este año se haya disparado aún más la contaminación es el intenso calor, que genera más ozono; los incendios forestales que se registraron de marzo a junio; la actividad de la refinería de Pemex en Cadereyta y la sequía, que provoca resequedad en el ambiente.

Además, señala la secretaría que este año entró en vigor una nueva norma oficial mexicana (NOM) de calidad del aire que endureció los criterios, lo cual se tradujo en que, con menos contaminantes, aumentaron los días fuera de la norma.

“En automático (la nueva norma) dio lugar al incremento en el número de días que se rebasan las normas en comparación a los datos reportados en años anteriores”, dice el reporte.

En entrevista, el Secretario del Medio Ambiente del estado, Alfonso Martínez Muñoz, señaló que la autoridad reconoce la gravedad de la situación y por eso ya arrancaron el pasado miércoles las “mesas de adaptación de cambio climático” en las cuales se acordará “la hoja de ruta” para atacar el problema.

“Vamos a estar trabajando por los próximos nueve meses para al final tener un documento donde vengan las metas específicas de reducción de dióxido de azufre, de dióxidos de nitrógeno, de PM2.5, PM10 y donde todos los actores firmemos de cara a la ciudad para que esa sea la ruta a seguir en los próximos años”, afirmó.

Martínez Muñoz señaló que cada sector establecerá voluntariamente la cantidad de contaminantes que reducirá, pero se basarán en la opinión de expertos que establecerán criterios alcanzables.

Con información de elhorizonte.mx