La clave del bullying que puede ser imaginaria

Discrepan investigadores en conceptos clave del acoso…

Por: Eduardo Castillo Mtz.

Según expertos en psicología, uno de los elementos más importantes para que se dé el bullying o acoso escolar, puede ser imaginario, pero aceptado por un grupo social, y es que estudios recientes han demostrado, que no siempre el más fuerte –físicamente- tiene el poder implícito, como se supondría en el papel.

De visita en Ciudad Victoria para dictar la conferencia “Acoso escolar y sus repercusiones en los distintos participantes”, evento organizado por la Unidad Académica de Trabajo Social y Ciencias para el Desarrollo Humano (UATSCDH) de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT), la Dra. Ana del Refugio Cervantes Herrera, profundizó en la problemática que ha impactado negativamente en el contexto escolar mexicano.

A este respecto la profesora e investigadora de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, explicó que el bullying implica una intensión hostil, así como un desbalance de poder entre el agresor y la víctima. “Donde las acciones negativas se entienden como infringir dolor o incomodidad, que eso es algo, que se nos escapa mucho, por ejemplo: cuando la victima de pronto se atreve a decir algo, -maestra me está molestando- Que es lo primero que dice el acosador –si yo ni lo estoy tocando, yo estoy acá en mí lugar, no estoy haciendo nada-“.

“No es necesario tocarlo, me puedo quedar viendo fijo a alguien con cara de desagrado, y piensen cuando alguien se queda viendo fijo, ya no es agradable, incluso si sonríen ¿no?”.

“Ver fijamente a alguien puede incomodar suficiente y eso es conducta antisocial, eso es de alguna manera invadir e interrumpir el flujo de la conducta del otro, entonces eso es algo que debemos de tener claro”, subraya.

El poder no siempre lo tiene el más fuerte…

“Uno de los elementos básicos por ejemplo, es el desbalance de poder y la intensión hostil, como sabemos si alguien tiene la intensión de incomodar a otro o no, ¿cómo lo podemos saber con certeza?”.

“El desbalance de poder se entendió como fuerza, como en las películas de adolescentes, el chavo grandote musculoso con su chamarra del equipo de futbol, llega y agarra al flaquito de lentes y lo mete en el locker, ¿entonces el desbalance de poder es de fuerza?, ¡pues no!”.

“Conforme avanzaron los trabajos se fue encontrando que eso del desbalance de poder no solo era de fuerza, se empezó a encontrar que podía haber alumnos, que podían ser grandes y fuertes y eran acosados, y podían ser acosados por el chaparrito de lentes escuálido”.

“Entonces decimos, ¿Qué pasó? ¿Qué es esto del desbalance de poder? ¿Esto no es bullying o qué? Y aquí está lo importante, el desbalance de poder es una ventaja real o imaginaria, pero que es clara para el grupo de pares que tiene el agresor con respecto a la víctima”.

“El agresor puede ser más alto, más guapo, más divertido, más atlético, tener más amigos, más dinero, y esa ventaja puede ser social… O Puede ser imaginaria. Nos tocó trabajar una vez en una escuela primaria y el agresor era el niño más chiquitito, más flaquito y con cara de más buena gente de todos, dices bueno, pues ¿qué ventaja tiene este niño, con respecto a los demás no?, porque tenía dos salones pendientes de él, se hacía lo que él decía, cuando él decía, como él decía, y tan rápido como fuera posible”.

“Encontramos que esa ventaja que él tenía sobre el resto, era que tenía un primo cholo, entonces él decía te voy a echar a mí primo y a todo su barrio, ósea, imaginen era un niño de 6 años, cuanta es la probabilidad de que su primo adolescente, ya grandote, cholo y todo su barrio, vayan a ir a golpear a otro niño pequeñito, porque lo dice el niño pequeñito, ósea tendiente a cero, en el mejor de los casos, ¿entonces qué pasaba? Está ventaja que tenía era imaginaria, pero era muy clara para el grupo. Esto es el desbalance de poder, entonces desde esa desventaja recibe la agresión y la sufre”.

¿Cómo saber si hay intensión de acosar?

“El otro detalle del asunto conceptual es la intensión, ¿cómo puedo saber si alguien quiere hacer algo?, y eso fue de hecho una cosa que a mí me preocupó cuando empecé a trabajar con esto, ¿Cómo puedo tener la certeza de evaluar esto?”.

“Me puse a trabajar sobre el concepto de intensión, que es y cómo debo evaluarla, y lo que encontramos es que la intensión es la tendencia a… Aquí podemos encontrar la intensión de ir y la repetición en el escalamiento de la conducta, puesto que intensión es la tendencia a…”.

“Entonces, la repetición que es la tendencia no estable, para realizar una conducta, nos puede mostrar la intensión de ella, y es muy claro, si hago llorar a mi compañero no me queda duda si lo estoy incomodando o no, tengo la certeza”.

“Ósea no se le va a ver si lo hago llorar, si lo hago sentirse torpe o feo, pues no le va salir un moretón en la cara, no se le va a ver, pero finalmente es muy claro en su conducta, y en su reacción que esté logrando ese fin, y en esa repetición podemos encontrar la intensión”.

Sostuvo que trabajos previos la llevaron a distinguir cinco elementos de la definición, “el acoso escolar es la visión de conductas agresivas de uno o más participantes en particular a otro en especifico, y esto también es importante, cuando estamos ubicando acoso escolar, debemos tener cuidado de diferenciar a los chicos que emiten acoso escolar, de los chicos que emiten conducta agresiva”.

“Hay quien tiene pocas habilidades sociales y agrede a todos parejo, llegan y le dicen buenos días, – pues porque, responde- o le dicen, -oye donde compraste tus tenis, que te importa, dice- ósea no saben reaccionar a las emociones sociales, ya sea pro sociales o antisociales de los otros y entonces esos son agresores generalizados, y es otra cosa”.

“Y en el acoso escolar es directo la misma persona o el mismo grupo de personas molestan al misma persona siempre, entonces tenemos la emisión de conductas aversivas, la conducta aversiva es desagradable para el receptor, entonces ahí, va desde miradas, insultos, golpes, escupitajos, o mensajitos o todo lo que la imaginación nos pueda permitir”.

“Sucede únicamente en el contexto escolar por eso es acoso escolar, responde a estímulos discriminativos determinados, y es reforzada por el grupo de iguales, eso quiere decir que la persona que agrede no agrede al azar, agrede cuando es el mejor momento, de hecho tiene una muy buena comprensión de las reglas sociales del grupo, por eso es difícil para los maestros, voy a agredir cuando el maestro no me pueda ver, por ejemplo cuando sucede dentro del aula en actividad académica”, puntualizó.