Descubren 13 delfines muertos por derrame de petróleo

Un grupo de personas encontró a 13 delfines muertos o agonizando en playas de la costa sudeste de Mauricio, el sitio más afectada por el desastre ecológico que provocó el derrame de petróleo del buque MV Wakashio.

De acuerdo con medios locales, los vecinos de la región de Grand-Sable encontraron los cadáveres de seis delfines en el transcurso de la mañana de este miércoles, cuando investigaron más descubrieron más cuerpos de delfines flotando en el mar.

Ya para el mediodía, las autoridades revelaron que eran 13 los mamíferos que perdieron la vida debido al desastre ecológico del buque ya mencionado.

Se debe, sin duda, a la toxicidad del agua, concluyó el oceanógrafo Vassen Kauppaymuthoo, en declaraciones al diario local portal Le Mauricien.

El agua es TÓXICA

El experto señaló que la muerte de los delfines es sólo el comienzo de las consecuencias que deja la caída del petróleo del granelero japonés MV Wakashio, de bandera panameña, que embarcó hace un mes; el 25 de julio en los arrecifes de Pointe-d’Esny en el sureste de la Isla.

Los productos tóxicos que han contaminado el mar son un veneno muy poderoso. Es probable que haya varios efectos a largo plazo para toda la biodiversidad marina, alegó el experto marino.

De acuerdo con Greenpeace de África cuatro son los delfines muertos y otros cuatro se encuentran heridos, aunque fuentes oficiales confirmaron a EFE que la cifra es mucho mayor pero que aún no quieren divulgarlo.

Este es un día profundamente triste y alarmante para el pueblo de Mauricio y para su singular biodiversidad, conocida y apreciada por la comunidad internacional, alegó el director de campañas de clima y energía para Greenpeace África, Happy Khambule.

¿Por qué se derramó el petróleo?

Aún se desconoce si el desastre ecológico por el que fallecieron estos delfines es un fallo mecánico o un error humano. Y aunque al momento del accidente, el MV Wakashio no transportaba carga si tenía más de 200 toneladas de diésel y 3 mil 800 de fuel para consumo propio.

El barco se partió en dos, lo que aumentó el miedo a que provocara una catástrofe todavía mayor. En un operativo, dos barcos arrastraron la proa del granelero de unos 15 kilómetros mar adentro, para ser completamente hundida este mismo lunes a unos 3 mil 180 metros de profundidad en el océano Índico.

Hay que recalcar que la zona del derrame es una región de arrecifes de coral, que llevaban unos quince años rehabilitándose. También tenía un área rica en diversidad marina y terrestre, con importantes reservas naturales.