¿Qué es y cómo funciona la extorsión ‘Gota a Gota’?

Un préstamo rápido con abonos chiquitos puede ser tentador y muy útil de vez en cuando, pero hay que tener mucho cuidado en no caer en la llamada extorsión ‘Gota a Gota’, pues de hacerlo, pagar las facturas o compras puede costarte la vida, por eso te contamos qué es y cómo funciona.

Su operación es simple y llamativa, una persona te ofrece préstamos desde mil pesos sin necesidad de garantías o avales, con intereses muy altos, pero con la ‘facilidad’ de cuotas muy pequeñas.

Esto último es lo más peligroso de los también llamados ‘prestadiario’ o ‘préstamos exprés’, pues de no cumplir con los pagos a tiempo, los grupos delictivos se convertirán en tu mayor pesadilla.

¿Cómo operan los extorsionadores ‘gota a gota’?

Una vez que la víctima acepta el dinero de los extorsionadores ‘Gota a Gota’, debe proporcionar su información personal, es decir su nombre y dirección.

Con esos datos, al primer día de retraso los delincuentes acuden a su domicilio para pedir el monto de ese día. En caso de tener un negocio, estos acuden al lugar para cobrar el préstamo en efectivo o en especie, es decir, se pueden llevar lo que quieran del local.

A la larga, los intereses multiplican la deuda y el acoso aumenta, llegando incluso a los golpes, amenazas y hasta secuestros.

¿De dónde surgen las extorsiones ‘gota a gota’?

Estos grupos delictivos dedicados a la extorsión comenzaron en Sudamérica, pero rápidamente han extendido sus tentáculos al resto de Latinoamérica en los últimos años y, si bien la mayoría en México si están conformados por colombianos, también empiezan a surgir grupos de centroamericanos y mexicanos.

A pesar de que las autoridades ya conocen el modus operandi, aún no hay alguna medida o campaña para tratar este problema en concreto.

¿Qué hacer en caso de caer en una extorsión ‘gota a gota?

En caso de ser víctima de una extorisión ‘Gota a Gota‘, lo primero que se recomienda es denunciar a estos grupos delictivos colombianos con las autoridades.

Cabe señalar que la única forma en la que alguien puede obligar a una persona a pagar, es por medio de una demanda mercantil. Ahora que ya sabes qué es y cómo funciona, mantenerse alerta, sobre todo los locatarios o dueños de pequeños negocios, pues son sus víctimas más comunes.